Artículo original: Why I'm not going to follow you back (It's not personal) de Phil Hollows. Traducción (con permiso) por: Jesús Pérez Serna.
Soy un ávido usuario de Twitter. Como tal, sé que mucha gente sigue a otros en Twitter con la esperanza de ser seguido de vuelta; es una manera fácil y rápida de aumentar la cuenta de seguidores (sea cual sea la razón por la que esto hace feliz a la gente).
A veces estas personas se enfadan y dejan de seguirte un poco después, como si el destinatario de su seguimiento hubiera sido de alguna manera indeciblemente grosero por no devolver el favor siguiéndoles a ellos.
Yo no lo entiendo.
Quizás sea cosa mía. Tal vez sea excesivamente grosero (estoy seguro de que lo soy, en alguna ocasión. Probablemente sin querer. Probablemente :-)).
Pero no te voy a seguir sólo porque me estés siguiendo.
No me malinterpretes. Estoy muy contento, emocionado, de que parezcas querer prestar atención a algunas de las cosas que escribo. Eres más que bienvenido y espero seguir siendo lo suficientemente interesante como para que te quedes. Tengo un ego y me siento halagado, créeme.
Pero seguirme a mí no es un contrato social. En lo que a mí respecta, no hay obligación moral de seguir de vuelta (repito, tal vez esa es mi rudeza innata, ya me dirás). Twitter no es LinkedIn o Facebook, donde las relaciones son recíprocas. Twitter es mucho más parecido a un blog: sigues a quien escribe y los seguidores leen. Conversamos. Si te suscribes a mi blog no se crea una obligación para mí de suscribirme al tuyo, eso sería una tontería. No veo por qué algunas personas piensan que Twitter debe ser diferente.
Uso Twitter como un medio para conversar, es fabuloso para eso. Es el uso principal que le doy. Pero no hace falta ser seguidor y seguido para hacerlo.
La cuestión es que mi atención es limitada. Necesito centrarme en los clientes, contactos, noticias de la industria y el trabajo del día a día. Así que soy muy, muy selectivo sobre a quién sigo, al igual que elijo con cuidado a qué blogs me suscribo. Hay más que suficiente ruido en mi cuenta de Twitter con las pocas personas a las que presto atención, y por lo tanto tengo mucho cuidado con quien puedo añadir. Asimismo, no dejo de seguir a casi nadie, precisamente porque me ocupo de valorar a la gente antes de añadirla. No estoy diciendo que sea un gurú o alguien super especial y que si sigo tu Twitter hayas conseguido algo especial, sólo estoy diciendo que cuando lo hago es porque es lo suficientemente interesante para mí como para seguir su ritmo. Eso es todo. Nada más.
Ahora bien, esto puede interpretarse como arrogante, altivo o pomposo (¡me han llamado cosas peores!). Pero en realidad refleja la existencia de días de sólo 24 horas y que si te estoy siguiente te quiero prestar atención, entonces ¿por qué molestarse?
Así que no es personal. Es pragmático. Si me estás siguiendo con la esperanza de que te voy a seguir a ti, por favor, no. Ve a seguir a Lady Gaga o a un político o a tu club deportivo favorito, que parecen seguir a todo el mundo. Haz crecer tu cuenta de seguidores de esa manera, aunque yo no entienda por qué eso es importante o necesario.
Soy un ávido usuario de Twitter. Como tal, sé que mucha gente sigue a otros en Twitter con la esperanza de ser seguido de vuelta; es una manera fácil y rápida de aumentar la cuenta de seguidores (sea cual sea la razón por la que esto hace feliz a la gente).
A veces estas personas se enfadan y dejan de seguirte un poco después, como si el destinatario de su seguimiento hubiera sido de alguna manera indeciblemente grosero por no devolver el favor siguiéndoles a ellos.
Yo no lo entiendo.
Quizás sea cosa mía. Tal vez sea excesivamente grosero (estoy seguro de que lo soy, en alguna ocasión. Probablemente sin querer. Probablemente :-)).
Pero no te voy a seguir sólo porque me estés siguiendo.
No me malinterpretes. Estoy muy contento, emocionado, de que parezcas querer prestar atención a algunas de las cosas que escribo. Eres más que bienvenido y espero seguir siendo lo suficientemente interesante como para que te quedes. Tengo un ego y me siento halagado, créeme.
Pero seguirme a mí no es un contrato social. En lo que a mí respecta, no hay obligación moral de seguir de vuelta (repito, tal vez esa es mi rudeza innata, ya me dirás). Twitter no es LinkedIn o Facebook, donde las relaciones son recíprocas. Twitter es mucho más parecido a un blog: sigues a quien escribe y los seguidores leen. Conversamos. Si te suscribes a mi blog no se crea una obligación para mí de suscribirme al tuyo, eso sería una tontería. No veo por qué algunas personas piensan que Twitter debe ser diferente.
Uso Twitter como un medio para conversar, es fabuloso para eso. Es el uso principal que le doy. Pero no hace falta ser seguidor y seguido para hacerlo.
La cuestión es que mi atención es limitada. Necesito centrarme en los clientes, contactos, noticias de la industria y el trabajo del día a día. Así que soy muy, muy selectivo sobre a quién sigo, al igual que elijo con cuidado a qué blogs me suscribo. Hay más que suficiente ruido en mi cuenta de Twitter con las pocas personas a las que presto atención, y por lo tanto tengo mucho cuidado con quien puedo añadir. Asimismo, no dejo de seguir a casi nadie, precisamente porque me ocupo de valorar a la gente antes de añadirla. No estoy diciendo que sea un gurú o alguien super especial y que si sigo tu Twitter hayas conseguido algo especial, sólo estoy diciendo que cuando lo hago es porque es lo suficientemente interesante para mí como para seguir su ritmo. Eso es todo. Nada más.
Ahora bien, esto puede interpretarse como arrogante, altivo o pomposo (¡me han llamado cosas peores!). Pero en realidad refleja la existencia de días de sólo 24 horas y que si te estoy siguiente te quiero prestar atención, entonces ¿por qué molestarse?
Así que no es personal. Es pragmático. Si me estás siguiendo con la esperanza de que te voy a seguir a ti, por favor, no. Ve a seguir a Lady Gaga o a un político o a tu club deportivo favorito, que parecen seguir a todo el mundo. Haz crecer tu cuenta de seguidores de esa manera, aunque yo no entienda por qué eso es importante o necesario.
¡Anda! Qué equivocado estaba. Y yo que creía que Twitter era conversación... ;)
ResponderEliminarEstimado @mkpositivo me tomo la licencia de rectificar tu post. Dicho sea de paso, fundamentalmente por lo que aquí escribes es la razón por la que estoy perdido y bloqueado en mi tw personal.
ResponderEliminarSi, cometo lo de rectificar tu cometario puesto que por esa misma razón yo si sé porque sigo lo que escribes pero no logro saber que haces tú en @modislar . No tengo línea editorial concreta, no cometo nada personal que me haga parecer mi muro “el Gran Hermano”, si tengo cosas profesionales interesantes no las desperdicio en mi tw, no hablo ni de futbol, ni de sexo, ni de religión, ni de política. Si hago RT hago demasiado ruido a mis pobres seguidores que lo hacen también en @comercialista.
Somos muchos en redes sociales los que por pocos seguidores que tengamos no nos los merecemos. Voy a seleccionar y pido que me seleccionen, para encontrar realmente si tengo algo que decir.
Voy a twittear lo siguiente; RT @mkpositivo: http://ow.ly/1bqxEX¿ Por qué me sigues? ¿ Es por educación? Pues me pones en un compromiso.
Firmado @modislar (No me acepta el perfil de tw en "comentar como")
Angel: como bien dice el autor, y a diferencia de Facebook o LinkedIn, para conversar en Twitter no hace falta ser seguidor de un usuario.
ResponderEliminarJuan Antonio: te sigo porque soy un ingenuo y aún tengo la esperanza de que un buen día amanezcas iluminado y escribas algún tuit interesante :P
¡Exacto! Por mi parte nada que alegar, de acuerdo al 100%. Ni sigo a nadie para que me siga ni devuelvo el follow porque sí. me parece básico y lógico
ResponderEliminarYo creo que hay soluciones mas ingeniosas y que permiten mantener una postura de cortesía. Personalmente entiendo que si alguien se toma la molestia de seguirme me resulta 'violento' no devolver la cortesía. Lo que hago es crearme una suerte de listas privadas en las que asigno 'pesos' en función de la relevancia del contenido que genera cada usuario, de esa forma puedo seguir con avidez a determinadas personas y a otras solo cuando tengo verdaderamente tiempo para ello
ResponderEliminarYo lo veo así también, no se porque tendría que seguir a todo el que me siga, no me parece cuestión de cortesía, sino de verdadero interés.
ResponderEliminarYago: cierto, usar listas es una forma de mantener cierto nivel de accesibilidad a la información.
ResponderEliminarBuena idea Yago Jesus para los que sigo pero no resuelve mi caso de preocupación por mis seguidores no puedo obligarles a que me pongan en una lista de indefinidos. Definitivamente le quito de mis seguidores a MK, uff que alivio ya no estoy obligado a ser brillante.
ResponderEliminar