Artículo original de Leo Babauta en Zen Habits: How to Kill Your Excuses. Traducción: Jesús Pérez Serna.
Todos inventamos excusas.
Pero el éxito es de aquellos que pueden matar las excusas como a los miserables gusanos que son.
Estoy demasiado cansado. No tengo tiempo. No me siento motivado. Prefiero no hacer nada. No tengo el dinero, equipos, espacio. No puedo porque ...
Todos inventamos excusas. A continuación: cómo acabar con ellas.
Todos inventamos excusas.
Pero el éxito es de aquellos que pueden matar las excusas como a los miserables gusanos que son.
Estoy demasiado cansado. No tengo tiempo. No me siento motivado. Prefiero no hacer nada. No tengo el dinero, equipos, espacio. No puedo porque ...
Todos inventamos excusas. A continuación: cómo acabar con ellas.
- Ver lo positivo. Las excusas se suelen inventar porque ya no tenemos ganas de hacer algo, estamos acentuando lo negativo. En su lugar enfócate en lo divertido de las cosas, en la felicidad que hay en ellas. Mantén una actitud positiva, o nunca podrás con las excusas.
- Asume la responsabilidad. Las excusas son formas de esquivar la responsabilidad. Si no tenemos el tiempo, dinero, equipo, etc, entonces no es culpa nuestra, ¿verdad? Incorrecto. Asume la responsabilidad y encuentra la solución.
- Encontrar una solución. Para cada problema hay una solución. ¿No tienes tiempo? Empieza con sólo 5-10 minutos. Encuentra el tiempo. Despierta antes. Hazlo durante el almuerzo. ¿No tienes gimnasio? Haz ejercicios en casa o en la oficina. ¿No tienes energía? Hazlo cuando se tienen los niveles más elevados de energía. Eres inteligente. Averigua la solución.
- Consulta tu objetivo. Esta es tu motivación, tu razón para hacerlo. Claro, podrías sentarte en el sofá, pero si piensas acerca de porqué deseas realmente conseguir una meta, te motivarás. Visualiza ese objetivo y empieza.
- Rinde cuentas. Ten un mentor fuera del trabajo, un socio de proyecto, un equipo, alguien a quien informar. Si tienes que cumplir con un entrenador o compañero, es más probable que hagas algo.
- Sigue adelante y encuentra tus excusas. Entonces, hazlo de todos modos.
- Mira este vídeo (en inglés). A continuación, ve y hazlo.
¡Ay que sí! Yo la primera en inventar una tras otra, a ver si con este artículo me reformo
ResponderEliminarPienso que la 5 es la única imprescindible, es muy fácil ceder a tentaciones y procrastinar a lo bestia sino tienes que justificar tu trabajo ante nadie.
ResponderEliminarComo alternativa se puede buscar un lugar de trabajo colectivo (coworking) que genere un ambiente de productividad lejos de los vicios de tu casa.
Ana: supongo que será más cosa de tu voluntad que de este u otro artículo. Ya sabes: ve y hazlo ;-)
ResponderEliminarPaco: tienes razón, aunque realmente la primera justificación debería ser ante ti mismo, y ese creo que siempre te acompaña, no puedes librarte de él :P
Pues a mí no me hace falta niguna excusa para tirarme en el sofá :P
ResponderEliminarBueno esto no es más que otra lucha más contra la mente, que es un torrente continuo de pensamientos influidos por todo lo que nos
ResponderEliminarrodea y lleva mucha mierda consigo, y de ahí muchas negatividades, porque el mundo esta lleno de negatividad me parece.